Uno reconoce a leguas a quien piensa antes de actuar y a quien hace lo contrario. A estos últimos les decimos que son gente “primaria”, es decir, personas que solo reaccionan. No miden las consecuencias ni de lo que dicen ni de lo que hacen, actúan y ya. Así que uno los ve arrepentidos cuando ya es tarde.
El espíritu jericoano invita a reflexionar pues somos reposados por naturaleza y también observadores, nos gusta analizar. Eso explica porqué en nuestro territorio no hay indicadores de violencia tan grandes como en otras partes, en otras palabras, no hay conflictos como los que se ven en otros lugares. No somos tumultuosos, no actuamos en gavilla. Sí, la vida y la historia nos han enseñado a pensar antes de actuar. Por este motivo, Jericó es propenso a las actividades culturales, lo que explica la presencia de tantos museos en nuestro pueblo, el gusto por la conversación y la vocación de progreso, de avance. En síntesis, para crear, hay que pensar.
Consejo de Redacción AdP
Esto es un homenaje a nuestros orígenes, un homenaje a esa Aldea del Piedras que crearon nuestros mayores, un homenaje a su coraje, su dedicación, su esfuerzo, su tesón, y su condición de visionarios.