Las empresas del mundo de hoy han avanzado al ritmo de los cambios de la sociedad contemporánea, no solo desde el punto de vista tecnológico, logístico, de gestión gerencial y gestión humana, sino también desde el punto de vista de la responsabilidad social y ambiental, así como de los relacionamientos con las comunidades.
Hay un concepto revolucionario en el ámbito de las comunidades. En el pasado, las organizaciones empresariales veían la relación con los territorios donde operaban como una asociación colaborativa, con la noción de que las empresas estaban en un lado y las comunidades en otro. Hoy, los expertos en gestión social hacen una afirmación revolucionaria: las empresas también forman parte de la comunidad.
Los intereses de la empresa deben ser los mismos de la comunidad: hacemos parte del mismo territorio, hacemos parte de sus necesidades y también hacemos parte de sus logros. Debemos ser buenos vecinos, vibrar con su futuro y también con su presente. Por eso, nos gusta resaltar aquellos casos en los que las relaciones vecinales fueron fluidas y propositivas, y en los cuales, trabajando juntos, alcanzamos grandes logros.
En esta edición, resaltaremos algunas cifras, pero nos llena de emoción saber que más de 5.000 personas de nuestro municipio participaron en diversas iniciativas, como el programa de bilingüismo, el de empoderamiento femenino, el de iniciación musical y el de fortalecimiento cultural. Asimismo, destacamos la participación en el programa de gimnasia artística y el apoyo al transporte escolar en las veredas.
Nos enorgullece subrayar nuestro respaldo a proyectos productivos agrícolas, ya que todo esto refleja nuestra comprensión del verdadero significado de la gestión social.
Además, con nuestra vocación de ser buenos vecinos, aprendemos del espíritu jericoano.
Consejo de Redacción AdP
Esto es un homenaje a nuestros orígenes, un homenaje a esa Aldea del Piedras que crearon nuestros mayores, un homenaje a su coraje, su dedicación, su esfuerzo, su tesón, y su condición de visionarios.