El agua es un líquido vital. Todos la defendemos porque constituye un verdadero tesoro. Tanto en Jericó como en el suroeste de Antioquia debemos esforzarnos para entender lo que significa carecer de ella, porque la hay en abundancia.
Es por esto que, entre todos, debemos garantizar que Jericó continúe siendo una potencia mundial del agua.
1. El drama de este recurso natural
La Organización de Naciones Unidas ONU y la Organización Mundial de la Salud OMS entregan permanentemente datos escalofriantes sobre la escasez de agua, motivo por el cual propician acuerdos orientados a evitar la catástrofe. Más de 2.200 millones de personas en nuestro planeta carecen de agua potable. De esta cifra, 297.000 niños menores de cinco años mueren anualmente como consecuencia de beber agua no apta para consumo humano. ¡33 niños cada hora!
Más de la mitad de la población, 4.600 millones de personas, “carecen de servicios de saneamiento gestionados de forma segura” por problemas asociados al agua. Además de la salud, este recurso también es fundamental para la industria y la agricultura. ¡El mundo necesita el agua! Por eso estudiar y aprender sobre ella es una urgencia. Todos tenemos que saber de qué hablamos cuando la defendemos.
2. Las causas de la escasez de agua en nuestro planeta
Aunque las causas son muchas y diferentes, los expertos de la ONU las han resumido en tres:
- La contaminación. Hacen referencia a la contaminación de aguas dulces, como también a la contaminación de la tierra y el aire.
- La sequía. Una causa asociada a la emergencia climática que potencia la aparición y el desarrollo de sequías.
- El uso descontrolado del agua. Tanto las actividades industriales como las actividades agrícolas requieren de enormes cantidades de agua, pero también es necesaria en nuestras propias casas. En ningún escenario debemos malgastarla o contaminarla.
3. ¿Quién tiene la culpa?
La mejor manera de no asumir responsabilidades es culpar a los demás del drama que vive el agua en nuestro planeta o, más grave aún, asumir que hay solo una actividad empresarial que desencadena la escasez. No, la culpa es el comportamiento que, ya sea por ignorancia, desconocimiento o de manera premeditada, realizan todas las personas y las actividades empresariales o agrícolas del mundo.
De hecho, los cinco grandes contaminadores de agua son: los pesticidas y productos químicos usados en la agricultura, la deforestación, los desechos industriales y domésticos, los combustibles fósiles y los altos índices de producción de basura. Así pues, este es un problema que tiene que ver con todos nosotros.
4. Asumir las tareas de los usos del agua con total responsabilidad
Lo que hacemos en Quebradona
Contrario a lo que ocurre con la extracción criminal, a quien no le interesa ni el agua ni el medio ambiente y le tienen sin cuidado las normas legales, nuestra empresa es una actividad legal que se rige por normas específicas, muchas de las cuales son orientadas por los organismos nacionales y regionales de control ambiental. Así, el estudio y el cuidado del agua no solo es producto de nuestras convicciones, sino de las reglas que nos orientan.
A: Profesionales con conocimiento
Esto explica la presencia de geólogos expertos en nuestro equipo técnico, que tienen además subespecializaciones en temas puntuales del agua. Profesionales que “estudian los procesos internos y externos que han dado forma a la tierra”, lo que les permite desarrollar topografías geológicas para cartografiar la distribución por tipos de rocas y otras características de la superficie de la tierra, tanto como entregar mapas y bases de datos para la toma de decisiones. De hecho, es su conocimiento el que permite entender las condiciones y los procesos que se viven a lo largo de millones de años para que se formen recursos como el agua, el petróleo, el gas y los diferentes minerales.
B: Más de 13 años estudiando las rocas y las aguas en Jericó
Es bueno hablar primero de las aguas subterráneas
En una zona como la de Jericó el ciclo del agua se nutre de las lluvias. Parte de este líquido se filtra a la tierra y configura las aguas subterráneas de los territorios; pero no se puede perder de vista una cosa: sus volúmenes dependen, por lo general, del tipo de rocas que se encuentran en el subsuelo:
- Acuíferos: rocas que por ser muy fracturadas o porosas pueden no solo almacenar mucha agua, sino dejar que fluya.
- Acuitardos: rocas que almacenan baja cantidad de agua y que además no la dejan fluir.
- Acuicludos: rocas que son como las arcillas, recogen agua, pero es imposible que salga de ellas.
- Acuífugos: rocas totalmente impermeables que ni siquiera reciben agua.
Todo este proceso de investigación, con más de 100 km de perforaciones, 52 piezómetros instalados y más de 200 ensayos de permeabilidad, entre otras pruebas realizadas, ha estado orientado a tener clara la clasificación de la permeabilidad de las rocas, y conocer cómo operan las aguas subterráneas. Definitivamente los estudios concluyen que, en el territorio de Jericó, las rocas determinantes son los acuitardos, cuya permeabilidad es baja. Esta conclusión científica es refrendada por una condición adicional de carácter histórico: no hay ningún registro que dé cuenta de la existencia de pozos de agua desde las épocas de los primeros asentamientos humanos en el territorio. Los pozos son propios de zonas de acuíferos.
Hay una zona que no ha podido estudiarse con la misma profundidad y que cubre dos kilómetros, porque hay un sector de la comunidad que cree que los estudios son lo mismo que la explotación minera. Hemos insistido en llegar a acuerdos para lograrlo y terminar de esclarecer científicamente la permeabilidad de la rocas en ese tramo.
Miremos las aguas superficiales
Los estudios también permiten entender la cantidad y calidad de las aguas superficiales con énfasis en el componente hidrobiológico, es decir los peces, los microorganismos y la vida que gravita dentro de esas aguas.
El diseño del proyecto minero incluye para su operación captar agua del río Cauca, el segundo río más grande del país, por lo que el uso y consumo de agua será imperceptible.
Adicionalmente, en la planta de procesamiento del mineral, se recirculará más de un 80% del agua usada, reduciendo así la captación del río Cauca.
El agua que no se recircula o rehúsa se lleva a una planta de tratamiento, por lo que el vertimiento al Río Cauca será mucho mejor que la calidad actual del río.
Los estudios permiten tomar mejores decisiones.
Un proyecto como Quebradona, exige contar con mucha información, para responder a tres exigencias sobre el manejo del agua:
- Minimizar el consumo de fuentes naturales existentes en el territorio.
- Maximizar la recirculación del agua que se utiliza.
- Realizar un adecuado tratamiento de las aguas regresadas al medio ambiente.
Más de 13 años estudiando el subsuelo de Jericó, nos permiten hablar con conocimiento sobre el estado de las aguas y la mejor manera de protegerlas, a través del uso y consumo responsable del recurso y de programas de reforestación y cuidados de cuencas de la zona.
Consejo de Redacción AdP
Esto es un homenaje a nuestros orígenes, un homenaje a esa Aldea del Piedras que crearon nuestros mayores, un homenaje a su coraje, su dedicación, su esfuerzo, su tesón, y su condición de visionarios.