Soy una mujer de Támesis que completó su bachillerato en 2015 y tengo 24 años. La falta de oportunidades para cursar una carrera universitaria debido a la ausencia de oferta educativa de nivel superior en nuestra región me ha obligado a desempeñar trabajos informales que se encuentran muy lejos de mis aspiraciones. El futuro es para mí una preocupación constante, y considero que este sentimiento también está presente en todos los jóvenes de mi generación. Son muy pocos los que tienen la oportunidad de viajar a Medellín para continuar con sus estudios.
Asistí a una reunión informativa sobre el proyecto Minera de Cobre Quebradona. Fui con gran curiosidad y también con prevención. Había escuchado opiniones negativas acerca de él: se decía que era un proyecto minero que podría traer problemas, que la minería tiene impactos perjudiciales, que afecta el suministro de agua y el paisaje; incluso, se mencionaba que ese proyecto de oro constituía una tragedia para nuestra comunidad.
Me sorprendió escuchar en la reunión una versión que no coincidía con lo que algunos vecinos me habían comentado. En primer lugar, se aclaró que no se trata de un proyecto para extraer ORO, sino para extraer COBRE. Fue en ese momento que comencé a comprender que muchas personas opinan sin tener un conocimiento preciso, sin estar al tanto de los detalles reales del proyecto. Forman opiniones basadas en rumores y comentarios.
Consideré muy positiva la invitación que nos extendieron para visitar el proyecto, ya que la información que obtuve resultó ser completa y disipó todas mis dudas.
No, el proyecto Minera de Cobre Quebradona no resultará en la degradación del agua ni en la destrucción del paisaje. Es un proyecto decisivo para la transición energética, y tiene el potencial de convertir al Suroeste en un referente mundial gracias a su avanzada tecnología para la extracción del mineral y sus enfoques innovadores desde la perspectiva ambiental.
Me permito expresar con respeto a todos que cada individuo tiene la libertad de apoyar o no un proyecto, pero es importante que la elección que se tome esté fundamentada en información precisa y no en rumores infundados, datos incorrectos o ejemplos inapropiados que no guarden relación con la realidad de lo que ocurrirá en este territorio.
Me emociona comprender que un proyecto de esta magnitud efectivamente contribuye al progreso de la región, crea oportunidades laborales y puede propiciar el avance de iniciativas educativas, de salud e infraestructura. Estas acciones podrían abrir perspectivas para los jóvenes y para todos, brindándonos nuevas oportunidades y caminos para alcanzar nuestras aspiraciones. Esto es lo que yo creo.
Consejo de Redacción AdP
Esto es un homenaje a nuestros orígenes, un homenaje a esa Aldea del Piedras que crearon nuestros mayores, un homenaje a su coraje, su dedicación, su esfuerzo, su tesón, y su condición de visionarios.
One comment
Elkin Albeiro Ruiz Vélez
Octubre 6, 2023 at 2:07 pm
Hablando de hechos reales, los ambientalistas son izquierdistas camuflados, que se aprovechan del desconocimiento del campesino para inventar la degradación del ecosistema por los grandes proyectos, que traen desarrollo y progreso a las comunidades.
Otros enemigos soterrados y escondidos son los grandes e influyentes gamonales en cada región, que por años y descendencia han explotado al campesino con salarios infames y falta de oportunidades, bajo ninguna circunstancias les conviene la llegada de grandes empresas con magníficas oportunidades de salarios y futuros promisorios de educación y bienestar para los presentes y futuros desendientes.